El solitario es un juego clásico de cartas que se puede jugar con una baraja española. Es un juego divertido y desafiante que se puede disfrutar en solitario. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo jugar al solitario con una baraja española: 1. Baraja española: El solitario con una baraja española se juega con 40 cartas en lugar de las 52 cartas de una baraja estándar. La baraja española consta de cuatro palos: copas, espadas, oros y bastos. Cada palo tiene 10 cartas numeradas del 1 al 7 y tres cartas adicionales: la sota (equivalente al caballero), el caballo y el rey. 2. Objetivo del juego: El objetivo del solitario es ordenar todas las cartas en cuatro montones o columnas según su palo y en orden ascendente, comenzando con el 1 y terminando con el rey. 3. Distribución de las cartas: Para comenzar, se reparten siete pilas de cartas boca abajo, con una sola carta en la primera pila, dos en la segunda, tres en la tercera, y así sucesivamente, hasta siete cartas en la última pila. Las cartas restantes se colocan en un mazo boca abajo. 4. Movimiento de las cartas: El jugador puede voltear la carta superior del mazo y ubicarla en una de las columnas de cartas en orden ascendente, siempre que la carta sea del mismo palo o uno menos en número. Las cartas se pueden mover entre las columnas para revelar nuevas cartas y crear secuencias ordenadas. 5. Uso de los montones: Los montones se utilizan como espacio adicional para mover las cartas y crear secuencias ordenadas. Se pueden mover cartas en orden descendente y de diferente color entre los montones. 6. Cartas libres: Las cartas libres se pueden mover a cualquier momento y lugar disponible en el tablero. Estas cartas pueden abrir nuevas oportunidades para mover y organizar las otras cartas. El solitario con una baraja española es un juego de paciencia y estrategia. Requiere habilidad para planificar los movimientos y encontrar la mejor manera de organizar las cartas en los montones. ¡Disfruta del desafío y diviértete jugando al solitario con una baraja española!